La aventura de ingresar a un grupo de autoayuda me ha
regalado tanto que ya me considero una
hija de estos grupos en la internert; si porque ya la ayuda esta al alcance de todos con tan solo un click. Es más, me
ha dado la oportunidad de nacer de nuevo a una vida donde existe el amor, la
paz, las personas y la alegría. Es una
vida que jamás imaginé, donde el conductor es Dios, un Dios nuevo que apenas
estoy conociendo.
Mi dolor, mi frustración, mi derrota ante la fatalidad,
hicieron de mi vida un completo desastre, un sinsentido. Escondí mi corazón en un cofre y le puse llave,
no conforme con eso, hice un hoyo en la tierra y lo enterré lo más profundo que
fui capaz. Pensé, de esa manera ya nadie
podría lastimarme. El problema fue que
me quedé sin corazón y por lo tanto, sin capacidad de amar.
Cuando me hice miembro de estos grupos mi vida estaba hecha un guiñapo y al fin comenzó a tener propósito. Ahora sé que amar es poner mi corazón en
riesgo, pues si lo escondo tal vez no será herido pero vivir sin él no es
posible. Una vida sin amor es solitaria
llena de depresión, ansiedad, miedo, obsesiones y muchos otros males. ¿Quién quiere vivir así? Nadie, pues todos nacimos para ser felices y
vivir en sociedad; y cuando esto se distorsiona por el egoísmo, la felicidad se
pierde.
Hoy apenas comienzo a dar mis primeros pasos en esta
nueva vida de la mano de Dios. Y aprovecho la oportunidad para invitar a los
que sufren a unirse al único medio que conozco para recuperarnos de la
enfermedad mental y emocional, también llamada neurosis. Date una oportunidad pues solo tú puedes
decidir si eres neurótico y si quieres recuperarte. http://reunionesdeneuroticosanonimos.blogspot.com
Anímate.
No hay comentarios:
Publicar un comentario